domingo, 26 de febrero de 2017

COMPARTIENDO EXPERIENCIAS CON TINTES NATURALES




El sábado 25 de febrero nos juntamos a descubrir los colores que encierran las plantas y un insecto muy particular, la reina de los tintes, la "cochinilla".

El encuentro fue en San Isidro, en el Taller de cerámica del bajo, donde Marcela nos abrió las puertas de su casa, un lugar con un encanto especial, donde fuimos recibidos con mucha calidez.

A pesar de las altas temperaturas se trabajó con mucho entusiasmo y voluntad. después de separar la lana en madejas, se realizó el mordentado de las mismas.



Elegí para teñir la corteza de un eucaliptus, cochinilla, una planta autóctona, el aliso del río y una flor, el solidago. Fuimos cortando y moliendo los materiales tintóreos y colocándolos en sus respectivos recipientes. Los llevamos al calor por aproximadamente una hora.



Pasado este tiempo colamos los tintes e introdujimos los hilados y el vellón.

Cerca del mediodía, mientras compartíamos el almuerzo, fueron apareciendo los primeros colores, acompañados de algunas expresiones como: "Ay mirá que lindo color", "¡Increíble!", "Esto es mágico".




Amarillos, morados, marrones los colores esperados, pero el aliso del nos jugó una mala pasada y en lugar del verdecito pretendido, nos dió otro tono de amarillo, cosa que puede suceder tratándose de plantas y no de anilinas.



Por la tarde nos dedicamos al mordentado y teñido de telas: Algodones, seda natural y paño de lana, sobre los cuales realizamos algunas reservas.

Utilizamos para el teñido madera de palo campeche, cochinilla con modificador de color y hojas de eucaliptus.

Al finalizar el día fuimos desatando y cortando los hilos para ir descubriendo los diferentes diseños que iban apareciendo en cada paño.



Fue un placer poder compartir con todos este maravilloso arte del teñido natural, herencia de diversas culturas, que fueron desarrollando a lo largo del tiempo este saber y que recibimos con gratitud para seguir transmitiéndolo a través de la enseñanza.



Gracias a Gabriela y a Carlos por las fotografías.

viernes, 3 de febrero de 2017

Tinción con índigo natural

¿Qué es el índigo?


El índigo, también llamado añil es un colorante natural que existe en diversas especies vegetales, básicamente en la hierba glasto (género Isatis), planta que es originaria del continente europeo, y de diversas especies del género indigófera, repartidas en América, Asia y África. 

Todas estas plantas contienen en mayor o menor cantidad el colorante índigo (indigotina)  y han sido usadas por diversas culturas para teñir telas e hilados, desde la antigüedad.



Planta del género indigófera                                             Hierba glasto o pastel (Isatis tinctorea)
 Un poco de historia

En la antigüedad en el continente europeo celtas y germanos ya utilizaban la hierba glasto o pastel, planta silvestre que crece en suelos húmedos y arcillosos. El teñido de las fibras se efectuaba a partir de la extracción del colorante , principalmente de las hojas y el proceso era largo y complejo. 

Tanto griegos como romanos conocían el ídigo asiático, y sabían que era un potente pigmento proveniente de la India. Pero no conocían su origen vegetal. Creían que era una piedra, porque el índigo llegaba en bloques compactos, creyendo que era por lo tanto de origen mineral y lo asociaban a una piedra semi preciosa. Esta creencia perdura hasta el siglo XVI.

Ya en el siglo XIII el glasto se cultiva en forma industrial para satisfacer la demanda de los tintoreros y se transforma en un producto de exportación de muy elevado precio. Pero este comercio decaerá desde la llegada del índigo de las Antillas y del nuevo mundo, cuyo principio colorante es mucho más efectivo.

Sin embargo el cultivo de este vegetal continuó hasta entrado el siglo XX cuando el añil natural fue sustituído por el sintético
Durante la época medieval el oficio de tintorero está muy regulado y compartimentado. Es muy estricta la división del trabajo y muy rígidos los reglamentos profesionales, reservándose los tintoreros el monopolio de las prácticas del teñido.                                       
Se han encontrado hermosas telas  en tumbas egipcias, datadas alrededor del año 2400 AC.  También hay referencias en el Viejo Testamento respecto a prendas que fueron traficadas por mercaderes de Sheba (hoy Yemén), teñidas de azul. Así mismo en Israel y Palestina se tiñó con índigo combinándolo con colores verdes y negros.

En África occidental podemos mencionar la antigua ciudad comercial de Kano, al norte de Nigeria, donde se conservan hoyos de tinte, que después de 700 años siguen en uso. Allí se tiñen prendas tanto tejidas a mano como a máquina.Las mujeres se dedican a anudar las telas para realizar las reservas y es tarea de los hombres la tinción.

 Son variadas las técnicas para ocultar las partes de las prendas que no se desean colorear. A partir de pliegues, nudos e introduciendo bolitas, granos de arroz o piedras, para lograr originales diseños. El teñido con índigo se conoce desde el neolítico en las regiones donde crece este arbusto y se ha conservado como un arte vivo especialmente en Africa Occidental y en el Sudeste Asiático, donde los tejidos teñidos se utilizan para rituales, como expresión de identidad o como símbolo de rango.

El árido clima del desierto de Atacama , en el norte de Chile y sur de Perú, permitió preservar muchas telas teñidas con la técnica de amarras, encontadas en tumbas  de esa región desértica. Estas piezas hoy se encuentran en el museo de arte precolombino de Santiago y en la Universidad de Antofagasta.


En el Londres  se encuentra una colección importante de fragmentos de tejidos teñidos con índigo, de las dinastías Han a la Tang (618-906 DC) de China.

Vestidos típicos Yoruba (Nigeria)                                                     Tina de tinción en lejano Oriente

La tinción con índigo natural



El índigo es un colorante sustantivo, de los cuales existen pocos. La característica de éstos, es que son insolubles en agua, por eso necesitan un proceso especial de tinción. 

El tinte se obtiene sumergiendo las plantas en agua hasta el punto de fermentación, batiéndolas para que ingrese oxígeno, hasta que el colorante precipita. Esta pasta  se deja secar y luego se muele para ser utilizada.                                                                                                                                                 
Este colorante no precisa de mordientes, pero es necesario disoslverlo en una solución alcalina y reducirlo por fermentación, por cocción de diversos frutos o mediante reductores minerales o químicos.                                                                                                                                                                                  
Las telas pueden sumergirse varias veces hasta obtener el color deseado.Al sacarlas del baño presentan un color amarillo pálido pero en contacto con el aire se vuelven azules.

Telas atadas y plegadas para "reserva"                  Telas teñidas con reservas, secándose 

Este fenómeno hace que el color sea muy sólido, es decir resistente a la luz y a los lavados. Además de su color único como tinte natural, esa durabilidad es lo que lo hacía, y hace tan valioso.

Bibliografía:

1- Tejidos del mundo, John Guillow y Brian Sentance.
2- Azul, historia de un color, Guillen Pastoreau.
3- Handbook of Indigo Dying, Vivien Prideaux.

miércoles, 18 de enero de 2017

Taller de tintes naturales en febrero 2017

Taller de tintes naturales
 sobre lana, seda y algodón
 e introducción a técnicas de reserva


El taller constará de dos partes, una que se desarrollará por la mañana ( de 9 a 13 hs.), luego habrá una pausa de media hora para compartir un almuerzo y a continuación una segunda parte, a partir de las 13.30 hasta las 17.30 hs.



Desarrollo

Primera parte (mañana):

  • Preparación del material a teñir, en este caso hilados de lana de oveja y vellón
  • Proceso para preparar los diferentes tintes a partir de hojas, flores, cortezas y cochinilla.
  • Teñido de las lanas.
Segunda parte (tarde):
  • Preparación del material: paño de lana, tela de algodón y seda.
  • Mordentado y tratamiento previo para cada una de ellas.
  • Preparación de los tintes y teñido.
  • Aplicación de algunas técnicas de reserva.

Los tintes que utilizaremos serán distintos a los del primer módulo.





El taller incluye todos los materiales: tintes naturales locales e importados, lana hilada y vellón.Para quienes hagan el módulo de la tarde se agrega tela de algodón, seda natural y un paño de lana.
En ambos módulos se incluye un cuadernillo con instrucciones detalladas que les permitirá repetir el proceso en casa.